Los cosacos de San Petersburgo han nombrado al presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, cosaco honorario.
El grupo Irbis Cossack ha otorgado el honor a Trump e incluso ha invitado a toda la familia del presidente electo a visitarlos en San Petersburgo. Según el líder Ataman Andrey Polyakov, un "programa inolvidable" de actividades tradicionales permitiría a Trumppara aprender sobre "el alma rusa misteriosa".
Los cosacos son un clan tradicionalmente leal al zar y ahora conocido por sus puntos de vista conservadores y ultrapatrióticos, sirviendo como una orden militar tradicional y volviendo a destacar en los asuntos de seguridad rusos en los últimos años.
Fuente: The Moscow Times