La banda eslovena Laibach será el primer grupo extranjero en tocar en Corea del Norte

27 de julio de 2015

La banda experimental eslovena Laibach se convertirá en el primer grupo musical extranjero en tocar en Corea del Norte.

La banda, formada en Yugoslavia en 1980 como el ala musical del colectivo artístico Neue Slowenische Kunst, tocará los días 19 y 20 de agosto en la capital norcoreana Pyongyang, como parte de su Día de la Liberación gira. La gira coincide con el 70 aniversario de la liberación de la península de Corea del dominio japonés y se filmará para un documental que se lanzará en 2016.

El organizador del concierto Morten Traavik, uno de los pocos occidentales que ha llevado a cabo proyectos creativos en el estado cerrado, explicó por qué la banda sentía un vínculo con el país.

“Tanto el país como la banda han sido retratados por algunos como parias fascistas”, dijo Traavik, “La verdad es que ambos son incomprendidos”.

Laibach, cuyo nombre es el nombre alemán de la capital eslovena, Liubliana, es visto por muchos como provocador debido a su uso ambiguo de símbolos nacionalistas, vestimenta militar y, a menudo, la naturaleza marcial de su música. Mientras que los críticos han acusado a la banda de ser fascista, otros argumentan que parodian el autoritarismo. El grupo aparecerá en el escenario en Pyongyang vistiendo ropa de civil norcoreana.

Laibach ajustará su lista de canciones para el contexto de Corea del Norte, realizando adaptaciones de canciones de El sonido de la música , así como interpretaciones de canciones folclóricas de Corea del Norte. Según la banda, durante los conciertos pedirán la reunificación de Corea.

“El pueblo coreano y la península de Corea se han dividido de manera violenta y dramática, por lo que sus aspiraciones legítimas de reunificación deben ser apoyadas”, dijo Laibach, “Corea del Norte está siendo rehén de la Doctrina Truman, un país unido definitivamente no está enel interés de las grandes potencias, Estados Unidos y China ”.

Greg Scarlatoiu, director ejecutivo del Comité de Derechos Humanos en Corea del Norte, declaró que si bien es poco probable que el concierto afloje el control del poder por parte del estado, exponer a los ciudadanos norcoreanos a la cultura del mundo exterior podría ser beneficioso.